Consejos para celebrar la Navidad con personas mayores

La Navidad es un periodo muy especial en el que compartir con familia y amistades momentos únicos. Es muy importante que sean acogedoras e inclusivas para todo el mundo, por lo que si vamos a celebrarla con personas mayores debemos adaptarlas a sus necesidades. Los cambios de rutina, las decoraciones estridentes o las comidas copiosas pueden resultar agotadoras y afectar a su bienestar físico y emocional. 

En este artículo, encontrarás una serie de consejos y cuidados para celebrar la Navidad con personas mayores, desde cómo adaptar las comidas y el entorno, hasta diversas actividades y planes para que se sientan cómodas, valoradas y como miembros imprescindibles de la celebración. 

Celebrar la Navidad con personas mayores: claves para una experiencia positiva

La Navidad es una época que, bien organizada, puede convertirse en una experiencia muy enriquecedora para las personas mayores. Los encuentros familiares y sociales refuerzan su bienestar emocional, fortalecen los vínculos afectivos y ayudan a reducir la sensación de soledad, que se intensifica durante estas fiestas en todas las franjas de edad. 

Para que la celebración sea positiva en cada aspecto, es fundamental fomentar la participación activa y respetar sus ritmos. Encárgales tareas como ayudarte en la decoración, preparar un plato del menú navideño o envolver regalos, de forma que se sientan valorados y que se tiene en cuenta su trabajo. Dedica tiempo a escuchar recuerdos y anécdotas navideñas o revisad álbumes de fotos, contribuyendo a mantener una mente activa y a revivir momentos llenos de felicidad. 

Alimentación en Navidad adaptada a los adultos mayores

Las celebraciones navideñas suelen ser sinónimo de comidas copiosas y cambios en la rutina alimentaria. Esto puede alterar la digestión y el bienestar de las personas mayores aunque, si deben llevar una dieta más estricta, es importante optar por recetas navideñas saludables para ellos. Además de este consejo, es importante seguir ciertos hábitos para disfrutar plenamente de estas fiestas, como: 

• Hacer entre 4 y 5 comidas diarias, además de masticar con calma. 
• Compensar los excesos con cenas ligeras para los adultos mayores.
• Beber entre 1,5 - 2 L de agua diarios. 
• Priorizar comidas blanditas: verduras al vapor, purés de invierno, cremas y pescado. 
• Controlar la sal y el azúcar. 
• Cambiar el café por infusiones para facilitar la digestión. 
• No acostarse inmediatamente después de comer: dejar un margen de, al menos, 2 horas.

La clave está en tener en cuenta las necesidades de cada comensal para así sentirse acogidos, cómodos y seguros. Es muy importante saber si tienen ciertos alimentos restringidos, si les faltan piezas dentales, sufren de disfagia o cualquier otra condición que convierta la hora de comer en un proceso delicado o con el que debemos tener más paciencia. Siendo conscientes de cada detalle, prepararemos unas comidas y cenas que harán que nuestra Navidad con personas mayores sea muy especial. 

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La importancia del entorno y los horarios durante las celebraciones

Un ambiente relajado y cómodo es clave conforme nos hacemos mayores, pero lo es en especial para aquellas personas que padecen demencia. Un entorno familiar es vital, por lo que incorporar elementos decorativos —como el árbol de Navidad o el nacimiento— puede obligarnos a modificar la colocación en las estancias. En la medida de lo posible, es muy importante no alterar demasiado la disposición habitual del mobiliario y que no sea de colores estridentes, pues puede propiciar episodios de agitación en ancianos. 

Darles todo tipo de información es muy importante y les aporta estabilidad: quiénes y cuántas personas seréis, cuánto durará o cómo sucederá la celebración son algunos datos que pueden ayudarles a afrontar mejor estas celebraciones. A su vez, es muy importante mantener unos horarios estables (en las comidas o la medicación) para reducir la ansiedad y el estrés, además de mejorar su bienestar y estabilidad emocional. 

Actividades para disfrutar de la Navidad con personas mayores

La Navidad es una excusa perfecta para pasarlo genial con nuestros seres queridos, y existen cientos de actividades navideñas para adultos mayores que podemos llevar a cabo durante estas fiestas. Las actividades como involucrarles en la decoración o en la planificación de las comidas reducen la sensación de soledad y aportan multitud de beneficios, manteniendo a los adultos mayores participativos y activos durante la Navidad. 

¿Tienes papel y boli a mano? ¿Abierta la app de notas del móvil? Aquí tienes algunas ideas de qué actividades puedes hacer en Navidad con personas mayores: 

• Decoración creativa. Se pueden hacer adornos caseros (como, por ejemplo, las manualidades con lana) para crear un entorno único, original y, lo más satisfactorio, poder decir que lo hemos hecho con nuestras propias manos. 
• Películas y juegos. Existen muchas películas de temática navideña con las que poder hacer un maratón o, simplemente, escoger las que más nos gustan. Por otro lado, los juegos de mesa para mayores son una actividad idónea que conjuga: diversión, socializar, estimulación mental y, sobre todo, ¡pasar un momento inolvidable! 
• Leer cuentos de Navidad. Estas historias nos encogen el corazón a la par que nos dan esperanza, y compartirlas con nuestros seres queridos crea momentos muy especiales. 
• Cocinar en familia. Si tu ser querido siempre ha estado al cargo de estas cenas, pídele que te ayude a supervisar la preparación, o con tareas sencillas: amasar galletas, decorar los platos o colocar la mesa. 
• Cantar villancicos. Muchas personas adoran la Navidad por estas canciones tan pegadizas, y cantar ayuda a reducir el estrés, mejora la memoria e incluso ayuda a reforzar el sistema inmune.
• Talleres variados. Estos talleres pueden darse en familia o con amistades. Son la excusa perfecta para aprender habilidades los unos de los otros, como: manualidades (como christmas), crochet, ganchillo, pintura, escritura... Mide los tiempos para evitar el cansancio y tendrás una tarde única en compañía de tus seres queridos. 
• Paseos y visitas a la ciudad. Muchas personas adoran visitar puestos navideños, ver las luces de Navidad o los nacimientos que se instalan cada año. Adáptalos a sus necesidades de movilidad y al ritmo, siendo cómodos y que respeten sus ritmos de descanso. 
  

Navidad en compañía: cómo prevenir la soledad no deseada en esta fiestas

Aunque estas fechas son un momento muy esperado por miles de personas, la Navidad también puede suponer un trago amargo para muchas otras. Cada persona tiene sus motivos únicos para que estos sentimientos de soledad aumenten en estas fechas: el «síndrome de la silla vacía», duelos, una red familiar o social frágil... Sin embargo, es una realidad cada vez más tangible en la que la edad, aunque influye, no es un marcador definitivo. 

Las expectativas sociales al no poder celebrar como antes la Navidad pueden generar frustración o sentimientos negativos en las personas, por lo que es muy importante darles nuestro propio significado y adaptarlas en función de qué nos llena y qué necesitamos. 

A nivel municipal, las instituciones públicas y los recursos comunitarios intentan promover actividades grupales, programas de acompañamiento y espacios de integración durante todo el año para que puedan compartir experiencias y establecer conexiones significativas. Ejemplo de ello es el programa contra la soledad no deseada Salamanca Acompaña, que gestionamos en Atenzia desde el año 2020. 

Es por ello que en estas fechas es importante fomentar: 

• Participar en actividades comunitarias o talleres. 
• Propiciar encuentros con vecinos, amigos o grupos intergeneracionales. 

Por otro lado y desde un enfoque de detección y prevención del aislamiento social, la teleasistencia domiciliaria es un complemento valioso al contacto social presencial. Este servicio, además de generar sensación de seguridad, proporciona un acompañamiento cuando no es posible estar físicamente al lado de la persona mayor, reforzando la red de cuidados, aligerando la presión en su entorno y evitando episodios de aislamiento o deseado. 

Conclusión

La mejor celebración es la que tiene en cuenta cada necesidad y respeta los ritmos de todas las personas implicadas, algo imprescindible a la hora de celebrar la Navidad con personas mayores. Saber qué alimentación específica debe tomar, adjudicarles tareas sencillas en base a sus capacidades, jugar a juegos tradicionales y de mesa para generar espacios de diversión para todas las edades o hacer talleres con amistades y familiares son algunas propuestas que hacer durante estas fiestas. A su vez, es importante tener en cuenta que la Navidad no es alegría para todo el mundo: la sensación de soledad no deseada crece en estas fechas y, además de saber qué recursos existen para paliarla, también debemos resignificarla y no sucumbir a las expectativas sociales.